Justicia Económica
El principio básico y bien aceptado de equidad, según el cual la consecuencia de las políticas oficiales debe ser la asignación equitativa de beneficios entre los participantes en una economía. Por ejemplo, aplicar políticas que reflejen el objetivo de la justicia económica podría implicar eliminar las prácticas discriminatorias de contratación y permitir que las personas trabajen libremente cuando se requieran sus habilidades empresariales.