Demanda Perfectamente Elástica
La Demanda Perfectamente Elástica es una situación económica teórica en la que se extingue el interés de los consumidores por comprar un producto empresarial si el precio del producto sube o el interés de los consumidores sube hasta el infinito si el precio baja. En una situación de demanda perfectamente elástica, la capacidad de respuesta de la demanda a un cambio en el precio o la elasticidad de los precios es infinita, lo que resulta en una curva de demanda plana.
Una curva de demanda perfectamente elástica es horizontal al precio de mercado. Es importante distinguir entre la demanda del mercado y la demanda de un productor. La demanda del mercado es la suma de las demandas individuales. La curva de demanda del mercado se inclina hacia abajo. La curva de demanda de un productor individual suele tener una pendiente diferente. Un comprador puede necesitar un bien o servicio específico, pero puede que no le importe el negocio que lo proporcione. La demanda de una empresa depende del número de competidores que tenga y de si puede diferenciar su producto. Si muchos productores ofrecen productos idénticos, entonces un comprador tomaría una decisión basada únicamente en el precio.
Las empresas con una curva de demanda perfectamente elástica operan en mercados perfectamente competitivos. Estas empresas suelen ser pequeñas y producen un producto o servicio idéntico al de otros productores. Ninguna empresa influye en el precio de mercado del bien o servicio que vende. Sus clientes sólo están motivados por el precio. Estas empresas son “price takers”, lo que significa que deben aceptar el precio de mercado o decidir no vender su producto. Cualquier empresa que intente subir su precio verá sus ventas caer a cero porque hay demasiados competidores que ofrecen el mismo producto a un precio más bajo. Por el contrario, una empresa podría bajar su precio, pero no lo haría porque podría vender todo lo que puede ofrecer al precio de mercado.
Resumiendo
Cuando cualquier cambio en el precio de un bien lleva a un cambio casi infinito en la cantidad que los consumidores demandan. Por ejemplo, si el precio sube, nadie deseará comprar el bien. Si el precio disminuye en absoluto, todo consumidor deseará comprar el bien. La demanda de una producción perfecta de un competidor es perfectamente elástica, debido a los innumerables sustitutos perfectos disponibles para los consumidores.