Gestión vs. Liderazgo
La gestión y el liderazgo se consideran a menudo como una misma cosa para muchas empresas. Aunque ambas comparten intrínsecamente muchas características similares, se diferencian en que no todos los gestores son líderes, pero todos los líderes son gestores. Son cualidades complementarias inexorablemente unidas entre sí, y cualquier intento de separar una de la otra es imposible. Mientras que el gestor existe para planificar, organizar y coordinar, el líder sirve para inspirar y motivar. Desde el punto de vista militar, el gestor es el general del campo de batalla, mientras que el líder es el comandante en jefe.
Cualidades de un directivo
Un directivo se considera una copia del líder, responsable de comunicar las normas y filosofías de la empresa a los empleados individuales y asegurarse de que las cumplen. Para un directivo, sus relaciones con los empleados están determinadas por un sistema de gestión jerárquica, y rara vez por las personales. Son responsables de mantener el funcionamiento diario de la empresa para que los engranajes de la operación se mantengan bien engrasados. Los directivos suelen estar más preocupados por los resultados trimestrales y suelen basar sus decisiones en estos cálculos. Los buenos gestores suelen ser considerados “buenos soldados” en el sentido de que rara vez cuestionan las decisiones de los niveles superiores de la empresa, y sólo sirven para hacer cumplir sus políticas.
Cualidades de un líder
En cambio, un líder se centra en las relaciones interpersonales con otros contactos importantes en otras empresas, así como en la promoción de personas prometedoras dentro de la empresa para fomentar la innovación. Un líder basa sus decisiones en los informes de los jefes de departamento para evaluar la situación de toda la empresa y las estrategias futuras. Un verdadero líder también estará dispuesto a ignorar los resultados trimestrales de la empresa durante varios trimestres -para disgusto de los accionistas- y a realizar inversiones con una perspectiva de crecimiento a largo plazo. Se considera que un líder es un “innovador intrépido” en el sentido de que desafía el statu quo y no teme asumir grandes riesgos en busca de grandes recompensas, tanto para los clientes como para los empleados y los accionistas.Comparación entre gestores y líderes
Se dice que un gestor se pregunta “cómo” y “cuándo”, mientras que un líder se pregunta “qué” y “por qué”. En muchas profesiones, los gestores y los líderes asumen el mismo papel. Sin embargo, si un líder de una empresa se limita a gestionar una empresa -en lugar de desafiar su verdadero potencial-, es probable que ésta se quede atrás respecto a sus pares del sector. Del mismo modo, si los gerentes se exceden en sus funciones e intentan rebelarse contra la empresa, entonces es posible que pronto se encuentren sin trabajo. En algunos casos, en los que la microgestión es esencial para maximizar la eficiencia, fomentar las habilidades y mantener a los empleados organizados, los directivos fuertes son una necesidad absoluta para evitar las altas tasas de rotación y la “fuga de cerebros” de una mano de obra cualificada. Un buen líder también se mantendrá en primera línea de batalla y estará familiarizado con todos los aspectos de la empresa, dirigiendo a través de la inspiración en lugar de coaccionar mediante el control jerárquico. Un gestor perfecto que alcance el estatus de verdadero líder será capaz de dirigir a las personas con eficacia y de aprovechar los puntos fuertes y los conocimientos correctos de cada persona clave de la empresa. Muchos directivos se esforzarán durante toda su carrera y nunca lo conseguirán, pero unos pocos expertos se convertirán en verdaderos líderes.